Bienvenidos al gran circo de los empresarios, donde la palabra "familia" tiene más vueltas que una montaña rusa. ¡Pónganse cómodos, señoras y señores! 

Entra el jefe con su mejor sonrisa de tiburón, proclamando melodiosamente: "Aquí somos una familia". Pero, ¿qué clase de familia es esta? ¿La tribu de los Brady? Nah, más bien una mezcla entre la Familia Addams y los Simpson.

En este contexto, "familia" significa que el jefe es Papá Oso, y tú, querido empleado, eres el ternerito que recibe todos los golpes cuando el barco empieza a balancearse. ¡Es hora de remar! Y si tienes una idea brillante, te dirán: "Eso es pensar como en familia". Pero si te equivocas, se convierte en: "Así no hacemos las cosas en esta familia". ¡Qué familia más selectiva!.

Mientras tanto, en el comedor de esta gran casa ficticia, el menú es variado: pizza fría para la sala de reuniones y café recalentado  para esas largas noches de "colaboración familiar." ¡Viva la cocina de empresa!

En esta "familia", los abrazos son virtuales y los "agradecimientos" se envían por correo electrónico. Pero cuando pides un aumento porque "papá" jefe acaba de comprarse otro coche de lujo, la familia se disuelve más rápido que un azucarillo en el café caliente. 

Así que, querido lector, la próxima vez que oigas "somos una familia" en el trabajo, recuerda: hasta la Mafia llama a sus miembros "la familia".