El lobby vegano no me engaña

enero 28, 2022

 

Empiezo este artículo lanzando la siguiente pregunta: ¿Qué haríamos sin abejas?. La calidad de los cultivos frutales, la preservación de la biodiversidad y la producción de miel depende de las abejas. Por ello, debemos proteger estos polinizadores con buenas prácticas desde la agricultura, la apicultura y la propia administración. 

Tal vez la apicultura se la única actividad de la cual dependemos como especie, sin ella simplemente no existimos y, en lugar de ayudar a los apicultores, se les ningunea y pisotea con el fomento de acciones que suponen un auténtico insulto a la inteligencia. Algunos "iluminados" con sus chorradas veganas, su  miel vegana, y sus tendencias apoyadas por puros ignorantes, hacen un flaco favor a este sector. 

Partiendo de la base de que, las abejas corren un inminente peligro por diferentes enfermedades y parásitos como la varroa, siendo muy difícil encontrar colmenas silvestres que sobrevivan más de un año... debido a los tratamientos que los apicultores les aplican, las silvestres sin tratamiento mueren. Los veganos apelan al consumo de miel vegana, queriendo acabar con la apicultura por su explotación, maltrato y muerte para conseguirla. El argumento vendría a ser, en que en resumidas cuentas,  la miel es producto de la explotación animal. Y es que todos hemos visto esas abejas esclavizadas, trabajando de sol a sol, bajo el látigo del maléfico apicultor que les provee el panal premoldeado, que les ahorra el 90 por ciento del esfuerzo total de la colmena. En fin, nótese la ironía. 

Ahora bien, yo les diría a los veganos que el problema de la explotación de las "abejas, abejos o abejes", reside en que, actualmente, las abejas tienen un pésimo convenio colectivo y un sistema de gobierno monárquico totalitario. Necesitan un abejorro podemita que las guíe a una revolución que les garantice prosperidad e igualdad. 

Así estamos actualmente, que algo tan básico como que, si la miel no es fabricada por las abejas no es miel, sea tan discutible..., desde luego es un claro reflejo de los especímenes, de los ejemplares que tenemos entre "la flora y fauna" de nuestra sociedad.  Edulcorantes como el agave, arce, jarabe de arroz integral, o como los veganos la tildan, miel vegana de manzana o miel vegana de diente de león... será otra cosa, pero no miel. 

Por último y no menos importante, recuerdo una vez más que, gracias a la miel protegemos a las abejas, hoy en grave situación de extinción. En La Palma, por ejemplo, tenemos mieles de excelente calidad, gracias a nuestras abejas y sus entornos naturales. La apicultura genera desarrollo local, lucha contra la despoblación y preserva la vida del planeta. ¡Qué nadie lo olvide!.


También te puede interesar

0 comentarios