Porque también existen momentos en los que queremos, simplemente, disfrutar, darnos un capricho, olvidarnos de esa dieta que, en muchas circunstancias nos resulta compleja de mantener y hasta, en algunas ocasiones, injusta... les traigo este rico plato de papas locas.

 

A modo particular, envidio sanamente esas personas que tienen un metabolismo que les permite comer de todo, atiborrarse... sin que les suponga ningún cambio significativo en su peso corporal. En mi caso, intento tener dos días a la semana de premio, es decir, días en los que consumo bastante calorías, ingiero esos alimentos que, básicamente no son muy recomendados para mantener el tipo, ni más ni menos. Es importante saltarse la dieta, de vez en cuando, para permitirnos persistir en el procedo de estar en línea que, como bien sabéis, exige un esfuerzo psicológico y, también, para que no tengamos el temido efecto rebote.

 

Así, dado el caso, preparé un rico plato de papas locas que, podremos elaborar de mil maneras. Con una base de papas fritas, se puede integrar salchichas, aros de cebolla fritos, carne mechada, un juego de salsas... hasta acompañarlas con algunos huevos fritos de codorniz. Todo depende de las preferencias particulares. Y, como siempre, con mi toque personal.

 

Espero que les haya gustado esta preparación. La imagen  que, ilustra la misma, corresponde a mi elaboración. Todos los derechos reservados.