Cómo bajar de peso y no morir en el intento
abril 16, 2020
Si estás buscando una publicación científica o uno de los innumerables artículos chorras que inundan la red bajo esta temática, lo siento... ¡Puedes seguir con tu vida!.
Siento ser tan brusco pero, a estas alturas, no me gusta ni perder el tiempo, ni cachondearme de la gente con un asunto tan sensible. Ya de por sí, es bastante dura la situación, para los que hemos tenido algunos "kilitos" de más en algún momento de nuestra vida o, simplemente, hemos convivido con ellos por nuestras propias características individuales de nuestro metabolismo. Así que, me toca muchísimo las narices, la cantidad de profesionales de "pacotilla" que hacen negocio con un tema tan delicado, y los estereotipos que nos impone esta sociedad, cada vez más egoísta, superficial.
Parto de la base de que no existen milagros, hay que "trancarse el pico" y "mover el culo"... Ya está, ¡así de simple!. En mi caso particular, ni he recurrido a batidos, ni alimentos mágicos, ni a esos planes de entrenamiento personalizado que nos vienen a "prometer el oro y el moro", ni mucho menos, a esas dietas de los "famosetes" que son contraproducentes para la salud a la larga, y que nos pintan una imagen perfecta. Presumen de ellas, de sus cuerpos, modelos, youtubers, influencers... prácticamente todos se han sumado al carro. Se prestan, incluso en muchos casos, a "farsas" por mero interés económico, mientras nos omiten los "retoquitos estéticos", las operaciones de "chapa y pintura" que se han realizado. Así que... ¡Tonterías las justas!
En mi caso particular, confieso que he agotado todas las vías posibles. Lo sé, también reconozco que he pecado, he puesto mi salud en peligro por hacer dietas agresivas, he perdido bastante dinero en programas de entrenamiento personalizado, etc... así que, poniendo mi ejemplo personal, he llegado a la conclusión tan básica de que, la mayoría de las dietas no son diseñadas para mortales. Cuando te piden que consumas o hagas uso de alimentos que ni están, ni existen, ni los conoces... ni tampoco los has visto en tu supermercado de confianza, en toda tu "puñetera vida", con perdón, mal empezamos.
En lo referente al entrenamiento, mi experiencia personal es que hay mucho aficionado o mal profesional, simplemente. Muchos impresentables que nos dan su "método", un "método" que podría tildar de "copia y pega", que no entiende, ni tiene en cuenta... ni tus cualidades físicas y, lo que es más importante, tu estado anímico, porque el proceso es complicado y, por ello, se debe estar lo suficientemente motivado y mentalizado para que, ante el más mínimo revés de nuestra báscula, no abandonemos el barco o tiremos la toalla. Existen, incluso, asesores de alimentación que no se "cortan ni un pelo", ¡todos los "gorditos" los hemos sufrido a lo largo de nuestra vida!. Te etiquetan en sus publicaciones de redes sociales, muy cansinos, muy pesados la mayoría de ellos, y que cuando ves sus fotos... dices, ¡ostias! ¡Si tiene el cuerpo más "escombro" que el mío!. Lo siento, siento ser tan radical, sincero... califíquenlo como quieran pero, es lo que hay. No me vendas un producto, cuando tú eres la referencia de ese producto y, al mirarte, algo no cuadra.
Así que, sin extenderme mucho más... He perdido 30 kilos en algo más de dos años y sigo estable, y de una forma saludable, ¡lo más importante!, de la siguiente manera, básicamente: acudí a mi médico personal, especialista en medicina deportiva y, después de realizarme las oportunas pruebas médicas y diferentes analíticas, él mismo me regaló un reloj que registraría mi actividad horaria. Hay una variedad importante en el mercado, que se ajustan a todos los bolsillos, de diferentes precios. El mío es un Fitbit, que con su respectiva aplicación móvil... me ha permitido seguir mis avances, motivarme, competir conmigo mismo. Después de ello, seguidamente, su recomendación fue la siguiente: "Jafet, mínimo 10.000 pasos diarios, no comas azúcares, ni grasas y, olvídate también, de los productos precocinados". He de añadir también que nunca he consumido alcohol, ni drogas, ni he fumado... así que, obvió recalcarme este aspecto, también importante.
Ese ha sido, querido lector, mi método, ¡ni más ni menos!. Dándome algún capricho entre semana, porque como bien me dijo él, si el cuerpo asocia que consumes pocos alimentos, haces reservas... de ahí que, exista mucha gente que se mata, literalmente, haciendo dietas y, para colmo, no bajan de peso de la manera deseada. También es válida esta recomendación para los que corren una maratón y, luego, se pegan tres meses en el sillón. ¡Ojo!.
Actualmente me encuentro saludable, sigo teniendo el mismo peso, "kilo arriba, kilo abajo", mi médico me sigue haciendo un seguimiento y acudo, regularmente, al gimnasio. Por cierto, el más caro del país, ¡otro truco más! Porque así, de esta manera, en esos momentos de pereza o bajón, me pienso más de dos veces el no ir a entrenar.
Espero que mi testimonio pueda ayudarte.
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